jueves, 9 de octubre de 2014

si coincidieramos en tiempo y lugar.

Aquí una lista de personas con las que me hubiera gustado hablar si
estuvieran vivos y se me diera la posibilidad de tiempo y lugar en el
caso de los que están.
El orden es casi aleatorio, digo Casi porque el que está primero en la
lista es mi favorito y el segundo le sigue en orden de importancia.
Los demás están en el orden que se me fueron apareciendo en la memoria.Por supuesto la lista no es completa pués siempre me voy encontrando con las huellas y los mensajes que  nos dejan otras personas que por algunos de sus talentos o virtudes se han hecho célebres.

Carl Sagan
Isaac Asimov
Athur C Clerk
Isaac Newton
Thomas Alba Edison
Albert Einstein
Martin Luther King
José Mujica
Juan Grompone
Eduardo Galeano
Stephen Hawking
Mahatma Gandhi
Alan Turing
Nikola Tesla
Ada Lovelace
Madre Teresa de Calcuta
Jean Pierre de Exupéry
Ernest Hemingway
Idea Vilariño
Bernardo Kliksberg
José Gervacio Artigas
Manuel Castells
Noam Chomsky
Nelson Mandela
Jiddu Krishnamurti
Leon Gieco
Ricardo Darin
Óscar Washington Tabárez
BB King
Mick Jagger
Michael Jackson
 NIck Vujicic
Julián Assagne
Steve Jobs
Edward Snowden

Jorge Battle

Coqueteando con la religión.



Estamos en tiempos de cambio rápido.
Los teóricos de la física están llegando a teorías que rozan lo místico, la religión está aceptando los avances de la ciencia y ninguna parece poder negar a la otra.
¿Será que hay algo de cierto en todas las religiones y que de apoco la ciencia lo está corroborando?

Se está descubriendo que algunos fenómenos que ocurren en el funcionamiento de nuestro cerebro sólo pueden explicarse en el campo de la física cuántica. 
Allí , donde ocurren fenómenos contraintuitivos muy difíciles de medir.

Se está comprobando que la naturaleza podría ser un holograma, un pensamiento, un modelo matemático, hasta se especula con que sea una simulación en algún super sistema computacional que no podremos jamás conocer, por estar inmersos en el.

A los fines prácticos se abren puertas a cosas que antes no podíamos concebir como ciertas si nos apegábamos a la ciencia.

La diferencia sigue siendo una cuestión de actitud.

Mientras la religión asume como ciertas cosas que no puede comprobar, la ciencia  asume algunas como posibles, y es capaz de cambiar las que asume como ciertas cuando se demuestra que están erradas.

La ciencia parece, y sólo parece coquetear con la religión. Pero la actitud del científico bien entendido es la de aceptar que se puede equivocar, y  aceptar lo erroneo de una teoria cuando aparecen argumentos comprobables.

No puedo decir lo mismo de la religión.
La religión, al que no tiene actitud científica puede darle paz, puede hacerle creer que el mundo se conoce con más completitud sin argumentos refutables.


Más de uno dirá "si no son refutables, son ciertos" . Grave error.
Si yo te digo que recibí instrucciones directas de Dios, nadie, absolutamente nadie puede refutarme esa afirmación y no vale ni el esfuerzo pues no hay forma de demostrar que no es cierta.

La ciencia se basa en la argumentación, y salvo las matemáticas y ciencias exactas derivadas, que son construcciones mentales accesorias de la ciencia que estudia la naturaleza, no asume como certeza absoluta ninguna de sus afirmaciones

Una afirmación va ganando grados de  verdad a medida que acumula argumentos comprobables a su favor y pierde total o parcialmente su veracidad cuando se encuentran argumentos también comprobables para refutarla.

Es posible que por intuición u algún otro mecanismo mental, la religión y la filosofía antes, encuentren verdades sobre el mundo antes que la ciencia.

Por ejemplo el cambio en la forma de ser de una persona a través de la meditación, se ha comprobado científicamente ,pero la ciencia se ocupa de estos fenómenos cuando entran en el terreno de lo comprobable o refrutable, y no utiliza la imaginación para asignar causas no comprobables ni refutables a los fenómenos como "el universo" o "el alma del todo" o cualquier otra construcción imaginaria.