Lejos estoy de escribir acerca de automóviles.
Hablo de otra cosa.
La realidad humana expetimenta un cambio acelerado.
Es decir que cada vez es mayor la cantidad de cambios que se producen en todas las actividades humanas para una misma cantidad de tiempo.
Esto venía sucediendo desde los orígenes de la humanidad.
Solo que por mucho tiempo los cambios se notaban con el paso de muchas generaciones.
Hoy día son cada vez más jóvenes los que sienten que no pueden seguirle el tren a los cambios.
Hoy día la capacidad de adaptación rápida a lo nuevo, la de aprender y desaprender, son claves para sobrevivir y progresar.
Los padres y los maestros nos vemos en figurilla para saber qué enseñarles a los niños, pero tenemos que esforzar la mente y la inventiva, para que no se les llene la cabeza con las montañas de estímulos y mensajes que llegan por todos lados.
Debemos controlar su uso de las tecnologías, los libros y juguetes que les regalamos, lo que ven en TV, hoy más que antes y cada vez mas, pero en la medida justa para no crearles un mundo ficticio, ni dejar que otros se los creen.
Algunos pensarán que mi mente está cerrada.
Creo que debemos enseñarles a dudar de lo que ven, de lo que oyen, de lo que dice la TV, de lo que aparece en internet, y usar la razón y la búsqueda de datos que confirmen lo más posible las cosas que se les dan como ciertas.
Creo que el método científico se debería de enseñar desde pequeños.
Educar sus emociones, es otra tarea importante, que no consiste en enseñarles a no sentir, ni a sentir, sino enseñarles a estar a cargo de sus propias emociones, verlas entenderlas, comunicarlas en forma adecuada, a ponerse en el lugar del otro, pero sin entrar en desesperación porque si no no ayudan. Manejar los contratiempos, la perseverancia y , el pensamiento a largo plazo, etcétera.
Hoy en día cualquier padre o educador tiene a su alcance los conocimientos que ha ido generando la psicología y la neurología, y esos conocimientos deben ser cosa corriente para la población en general.
Las falacias en las que caemos cómo consecuencia del funcionamiento de nuestros cerebros debería también entrar en la educación básica.